Thursday, March 24, 2011

El Taller


Un taller mecánico mezclado con un laboratorio químico, cables en el suelo, tornillos esparcidos, fierros, un mesón en el centro con martillos, destornilladores, clavos, etc. En una esquina una mujer sentada en el piso (un androide). Él vestido con overol, concentrado en una maquina parecida a un corazón, lo estudia, atornilla un par de cosas sobre él, encaja piezas. Ella entra.

ELLA: ¿Aún intentas repararlo?

ÉL: ¿tengo otra opción para que ella (apunta al androide) funcione? (golpea la máquina sobre la mesa, parece abatido)

ELLA: Tu sabes que si

ÉL: Esto… (toma la máquina y la muestra con orgullo, guarda silencio, medita) …pase mucho tiempo buscando uno de estos (insiste en que ella lo mire bien), era maravilloso… la mejor creación… sublime… con funciones perfectas…

ELLA: (lo interrumpe con tono irónico) y duró lo que dura cualquiera de estos artefactos desechables.

ÉL: (enojado) no es cualquier artefacto desechable… tu lo sabes mejor que nadie

ELLA: (irónica) claro que lo se, es una máquina confeccionada y adaptada por ti y para ti.

ÉL: (molesto) sabes que no es así (mira al androide) tu, mejor que nadie, sabes que yo solo quería darle vida (la mira a ella y luego al androide, mira el piso)

ELLA: ¿y tu vida?

ÉL: Mi vida esta aquí, en este taller, porque cuando…

ELLA: (lo interrumpe) mirando androides y reparando corazones ajenos.

ÉL: Este es mío, lo construí para ella (refiriéndose al androide)

Ella busca entre sus ropas, saca una foto doblada y se la entrega.

ÉL: ¿qué es esto?

ELLA: Una foto de ese día que caminamos por el parque… (él mira extrañado) …es un regalo, quiero que la conserves (él gesticula, ella tímida juega con su pie como dibujando figuras en el suelo, mira un instante el suelo, luego se incorpora y lo mira fijamente). Pensé que si de vez en cuando mirabas esta foto podrías olvidar esta realidad. Una realidad alejada de los androides… de los circuitos… de estos aparatos de mentira.

Le devuelve la foto con desprecio

ÉL: Debo seguir trabajando (vuelve a la mesa y comienza a trabajar en la maquina, unos minutos de silencio)

Ella rompe el silencio

ELLA: ¿Aún deseas repararlo?

ÉL: (levanta la cabeza y con tono seco) Cierra la puerta antes de salir.

Él se incorpora nuevamente a su trabajo, ella de pie, congelada, vacía. Camina hacia la puerta y antes de cerrar habla casi como un susurro.

ELLA: yo no necesito uno de esos todavía.

FIN DE LA ESCENA

Monday, March 07, 2011

El universo en un susurro

Espacio Oscuro, una banca en el centro, una luz roja la ilumina, él esta sentado en la banca, ella entra de un costado de la escena, lo mira

- Ella: ¿Eres Tú?

- Él: No sé a quién buscas

- Ella: (se encoge de hombros, confundida) Supongo que te buscaba a ti (se inca, posa sus manos sobre sus rodillas y lo mira a los ojos) ¿puedo descansar aquí? (con un pequeño gesto indica sus muslos, él hace un gesto afirmativo con la cabeza, ella se apoya sobre sus piernas y él le acaricia el cabello) se que aún queda mucho por aprender (suspira), muchas veces me siento confundida, intento entenderlo, pero… pero no puedo descifrar lo que intenta decirme.

- Él: silencia tu espíritu

- Ella: muchas veces el universo susurra tan despacio que no puedo oírlo.

- Él: ¿Realmente eres tú?

- Ella: cuando te escuche (mira al horizonte) se abrió una caja… allá (se pone de pie, busca, señala) ¿te imaginas donde? ¿lo puedes ver? (silencio) la caja se abrió y una luz se disparó al cielo, como si fuera una señala… como si alguien quisiera avisarle a los ángeles que debían bajar del cielo (lo mira)… tu debías bajar… es ahí cuando te vi sentado en la banca, pero… (duda) no te vi bajar del cielo.

- Él: yo pensé en ti.

- Ella: a veces creo que me queda mucho por aprender, pero el universo susurra tan despacio que no puedo oírlo.

- Él: (la toma de los hombros) Mírame (ella levanta la cabeza y lo mira) ¿qué ves?

- Ella: un beso

- Él: ¿qué?

- Ella: ¿te puedo besar?

- Él: soy un recuerdo… creo que no puedes besar a un recuerdo

- Ella: (confundida) ¿Cómo?

- Él: yo siempre te pienso

En un costado suena una caja de música, ella la mira, se acerca, se ilumina la caja de música, se apaga la luz donde esta la banda y él. Ella se acuesta boca abajo y mira cuidadosamente la caja de música.

- Ella: siempre te pienso, pero el universo susurra tan despacio que aún no puedes escuchar como grito por un beso.


Erzsebet