Astaroth estaba empecinado en impedir que naciera del próximo guerrero, en seis años construyó un ejercito poderoso, sin embargo no sabia donde buscar exactamente, su único aliado Vassago era el que podía informarle sobre el lugar y los padres que fecundarían a este guerrero, que con tantas ansias Astaroth esperaba destruir con sus propias manos, pero Vassago algo sabia y algo quería impedir, a pesar que Astaroth le había ofrecido una buena recompensa por sus servicios, este demonio le quedaba algo de humanidad en su interior y mintió sobre las coordenadas reales. Mando al ejercito de Astaroth al continente Asiático, los guió por lugares que no tenían nada que ver con las raíces reales de Amithes, si, el próximo guerrero que nacería era una mujer, la primera mujer dentro de una orden de caballería.
Lejos de Asia, lejos del ejército de Astaroth, los caballeros templarios deciden enviar al caballero Leraie a Bulgaria en busca de libros importantes para la orden, se le pidió que actuara con suma cautela en la campaña, debía vestirse con ropajes profanos y hacerse pasar por uno más dentro de los habitantes de Bulgaria. A pesar que este caballero llevaba años en la orden, su corazón era oscuro como una noche sin luna y sus años al servicio de la orden no lograron cambiar su alma, ni su espíritu. A penas se vio lejos de las miradas de la orden, comenzó a beber cerveza y tener sexo con mujerzuelas en cada cantina que se encontraba en el camino. Leraie no sabía lo que le tenía el destino preparado para él y tampoco sospechaba que Vassago seguía sus pasos desde que emprendió su viaje desde Francia.
Una vez en Bulgaria, Leraie en una de sus visitas a una de las cantinas que tanto le gustaba frecuentar, conoce a Usiel, una mesera hermosa como el amanecer. Este caballero le ofreció dinero para pasar una noche con ella, pero ella se resistió, era una mujer virgen y de valores que no le harían cambiar de parecer a pesar de la belleza y dinero del guerrero. Leraie molesto por tal rechazo, comenzó a beber sin control, y la miraba con odio, ira, rabia, sentimientos que un templario jamás debe tener en su interior. Vassago observaba desde lejos el actuar de él y antes que cometiera alguna locura, se acerco a él, le recordó para que estaba en Bulgaria “anda en busca de los libros del temple y mañana vuelve por esta muchacha” le dijo, y como este caballero estaba totalmente borracho, no asimilo la situación, tampoco se cuestiono porque este personaje extraño le decía y recordaba lo que tenia que hacer, lo tomo solo con un mensaje oculto de su conciencia. Volvió a su habitación y a la mañana siguiente fue en busca de los libros, los empaco y se dirigió nuevamente a la cantina, comió y bebió de manera blasfema, espero que Usiel llegara a su lugar de trabajo y la observo de manera perversa, se quedo bebiendo y comiendo hasta la madrugada, minutos antes que cerraran el lugar, él salio y la espero escondido en un lugar oscuro cerca de la cantina. Cuando ella pasaba cerca del lugar donde estaba escondido, Leraie la intercepto por detrás, le tapo la boca con fuerza, ella se resistió, lloraba, pero sus lagrimas no eran suficientes para pedir auxilio, ni menos para darle compasión a este cabello, se la llevo lejos del lugar, la arrastro hasta unos matorrales, forcejearon por largos minutos, él le saco sus ropas en forma brusca y desesperadamente comenzó a besar sus pechos, la violento, la beso por completo, mientras ella lloraba y se resignaba a la situación, Leraie disfrutaba la situación, no podía soportar que nadie se negará a él, por lo tanto ver a Usiel, indefensa, desnuda entre los matorrales, con sus ojos llenos de lagrimas lo hacían gozar cada vez más. La penetro una y otra vez con violencia, mientras ella lloraba y se entristecía, una vez que su semen entro al cuerpo de Usiel, los espermios buscaron rápidamente el ovulo que estaba esperando ser fecundado, una vez que ocurrió este acto el vientre de Usiel se ilumino, ella jamás lo va ha recordar, puesto que la violación fue tan violenta que en ese momento estaba inconciente al igual que Leraie, que yacía exhausto a su lado. Esa poderosa luz que ilumino su vientre salio del cuerpo y como una poderosa espada de luz magia atravesó el corazón del jamás recordado Caballero Templario Leraie.
Vassago con los libros de la orden bajo el brazo tomo a Usiel y la llevo a la puerta de la ermita de los templarios que habitaban en Bulgaria, la dejo ahí junto con los libros y una nota “He aquí la madre de Amithes, protegedla y cuidadla en silencio”. A la mañana siguiente los humildes caballeros de Jesucristo la encontraron y sin pensarlo ni una sola vez le asignaron una habitación en los aposentos subterráneos y secretos que poseían y una vez que la recostaron en la cama, nuevamente la luz del vientre salio al exterior y se formo una cúpula luminosa alrededor de la madre, una cúpula impenetrable, una cúpula que estuvo presente durante los 9 meses de gestación, durante meses que Usiel jamás recordara puesto que desde que Amithes habita en su interior, ella se quedo dentro de un largo sueño, un sueño que le mostrara una vida normal y feliz con su embarazo, vida que retomara cuando Amithes nazca.
En Diciembre de 1296, Amithes nace sin un padre presente, solo con su madre Usiel, pero con la presencia y enseñanzas de los Caballeros Templarios quien desde ese día jamás la dejaran sola.
Lejos de Asia, lejos del ejército de Astaroth, los caballeros templarios deciden enviar al caballero Leraie a Bulgaria en busca de libros importantes para la orden, se le pidió que actuara con suma cautela en la campaña, debía vestirse con ropajes profanos y hacerse pasar por uno más dentro de los habitantes de Bulgaria. A pesar que este caballero llevaba años en la orden, su corazón era oscuro como una noche sin luna y sus años al servicio de la orden no lograron cambiar su alma, ni su espíritu. A penas se vio lejos de las miradas de la orden, comenzó a beber cerveza y tener sexo con mujerzuelas en cada cantina que se encontraba en el camino. Leraie no sabía lo que le tenía el destino preparado para él y tampoco sospechaba que Vassago seguía sus pasos desde que emprendió su viaje desde Francia.
Una vez en Bulgaria, Leraie en una de sus visitas a una de las cantinas que tanto le gustaba frecuentar, conoce a Usiel, una mesera hermosa como el amanecer. Este caballero le ofreció dinero para pasar una noche con ella, pero ella se resistió, era una mujer virgen y de valores que no le harían cambiar de parecer a pesar de la belleza y dinero del guerrero. Leraie molesto por tal rechazo, comenzó a beber sin control, y la miraba con odio, ira, rabia, sentimientos que un templario jamás debe tener en su interior. Vassago observaba desde lejos el actuar de él y antes que cometiera alguna locura, se acerco a él, le recordó para que estaba en Bulgaria “anda en busca de los libros del temple y mañana vuelve por esta muchacha” le dijo, y como este caballero estaba totalmente borracho, no asimilo la situación, tampoco se cuestiono porque este personaje extraño le decía y recordaba lo que tenia que hacer, lo tomo solo con un mensaje oculto de su conciencia. Volvió a su habitación y a la mañana siguiente fue en busca de los libros, los empaco y se dirigió nuevamente a la cantina, comió y bebió de manera blasfema, espero que Usiel llegara a su lugar de trabajo y la observo de manera perversa, se quedo bebiendo y comiendo hasta la madrugada, minutos antes que cerraran el lugar, él salio y la espero escondido en un lugar oscuro cerca de la cantina. Cuando ella pasaba cerca del lugar donde estaba escondido, Leraie la intercepto por detrás, le tapo la boca con fuerza, ella se resistió, lloraba, pero sus lagrimas no eran suficientes para pedir auxilio, ni menos para darle compasión a este cabello, se la llevo lejos del lugar, la arrastro hasta unos matorrales, forcejearon por largos minutos, él le saco sus ropas en forma brusca y desesperadamente comenzó a besar sus pechos, la violento, la beso por completo, mientras ella lloraba y se resignaba a la situación, Leraie disfrutaba la situación, no podía soportar que nadie se negará a él, por lo tanto ver a Usiel, indefensa, desnuda entre los matorrales, con sus ojos llenos de lagrimas lo hacían gozar cada vez más. La penetro una y otra vez con violencia, mientras ella lloraba y se entristecía, una vez que su semen entro al cuerpo de Usiel, los espermios buscaron rápidamente el ovulo que estaba esperando ser fecundado, una vez que ocurrió este acto el vientre de Usiel se ilumino, ella jamás lo va ha recordar, puesto que la violación fue tan violenta que en ese momento estaba inconciente al igual que Leraie, que yacía exhausto a su lado. Esa poderosa luz que ilumino su vientre salio del cuerpo y como una poderosa espada de luz magia atravesó el corazón del jamás recordado Caballero Templario Leraie.
Vassago con los libros de la orden bajo el brazo tomo a Usiel y la llevo a la puerta de la ermita de los templarios que habitaban en Bulgaria, la dejo ahí junto con los libros y una nota “He aquí la madre de Amithes, protegedla y cuidadla en silencio”. A la mañana siguiente los humildes caballeros de Jesucristo la encontraron y sin pensarlo ni una sola vez le asignaron una habitación en los aposentos subterráneos y secretos que poseían y una vez que la recostaron en la cama, nuevamente la luz del vientre salio al exterior y se formo una cúpula luminosa alrededor de la madre, una cúpula impenetrable, una cúpula que estuvo presente durante los 9 meses de gestación, durante meses que Usiel jamás recordara puesto que desde que Amithes habita en su interior, ella se quedo dentro de un largo sueño, un sueño que le mostrara una vida normal y feliz con su embarazo, vida que retomara cuando Amithes nazca.
En Diciembre de 1296, Amithes nace sin un padre presente, solo con su madre Usiel, pero con la presencia y enseñanzas de los Caballeros Templarios quien desde ese día jamás la dejaran sola.
1 comment:
Que relato mas apasionante, amithes la guerrera de la templanza... fria y devota...
Cada dia me sorprendes mas..
te amo
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